Trabajar desde casa ofrece muchas ventajas, pero también trae consigo el reto de gestionar eficazmente el consumo energético. Uno de mis amigos se planteó esta cuestión y, tras algunas investigaciones y ajustes, logró reducir su factura de luz considerablemente mientras teletrabajaba. Así que decidí compartir algunas prácticas que pueden ayudarte a mantener un hogar eficiente mientras realizas tus tareas laborales desde casa.
Cómo ahorrar energía durante el teletrabajo
Cuando teletrabajas, es fundamental organizar tu espacio y tus dispositivos para que sean más eficientes. Aquí te dejo varias estrategias que puedes seguir para disminuir el consumo eléctrico en casa.
¿Cuántos dispositivos necesitas realmente?
Evitar tener varios dispositivos encendidos al mismo tiempo es un buen inicio. Limita el uso de equipo tecnológico únicamente a los dispositivos que necesites en ese momento. Si puedes, opta por un monitor externo eficaz en lugar de emplear múltiples pantallas. Los equipos electrónicos, incluso en modo standby, continúan consumiendo energía. Desenchufa lo que no estés usando y adquiere regletas con interruptor para facilitar esta tarea.
¿Qué puedes ajustar en tu espacio de trabajo?
El lugar que elijas para trabajar también influye en el gasto energético. Intenta ubicar tu escritorio en un sitio donde puedas aprovechar la luz natural, reduciendo así la necesidad de encender lámparas durante el día. Según datos del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), el aprovechamiento de la luz natural puede suponer un ahorro del 30% en iluminación.
Iluminación eficiente: más que bombillas
Considera el uso de iluminación LED, ya que consume hasta un 80% menos que las bombillas incandescentes y su vida útil es mucho mayor. También puedes instalar sensores de movimiento o temporizadores para que las luces se apaguen automáticamente en habitaciones que no ocupes frecuentemente. Además, ajustar la intensidad de las luces con dimmers puede ser otra apuesta para reducir el gasto energético.
El papel de los electrodomésticos y sistemas de climatización
En cuanto a la climatización, ajustar el termostato a una temperatura adecuada es clave. Según la Agencia Española de Meteorología (AEMET), mantener una temperatura de 21-23ºC en invierno y 24-26ºC en verano es ideal para la comodidad sin derrochar energía. Si tienes aire acondicionado, asegúrate de cerrar puertas y ventanas para que el sistema funcione con mayor eficiencia. Los electrodomésticos, como la lavadora, deben usarse en horarios no pico, aprovechando tarifas con menor coste si las tienes.
Casos prácticos de éxito
Un estudio realizado por la Universidad Autónoma de Madrid encontró que hogares que implementaron simples medidas de control energético, como el uso de enchufes inteligentes, lograron reducir su consumo energético en un 20% en un trimestre. Inspirarte en estos casos puede guiarte a adoptar cambios efectivos en tu rutina diaria.
Para maximizar los recursos y sacar provecho de dispositivos eficientes, puedes consultar las normativas actuales en España, como el Código Técnico de Edificación (CTE) que promueve la sostenibilidad y eficiencia energética en los hogares.
Finalmente, recuerda siempre revisar la etiqueta energética cuando hagas nuevas adquisiciones. Un producto con clase A+++ es el que menos energía consume. Aprovechar la tecnología inteligente, como enchufes y termostatos programables, hará la diferencia en tu consumo diario.